En este blog hablábamos hace algún tiempo de la importancia de los regalos promocionales ecológico como son una herramienta de las empresas para sintonizar con su target, teniendo en cuenta que la concienciación medioambiental es cada vez más una tónica en nuestra sociedad.
Y dentro de la variedad de productos ecológicos que una empresa puede utilizar con fines promocionales (USB, bolígrafos…), hay algunos que especialmente garantizan el éxito: “Sin duda, los artículos dentro de la línea plantas naturales tales como una lata con semillas de petunias o un bol de cerámica con semillas de salvia, son de lo más originales”. Pues bien, hoy vamos a ir un poco más allá y vamos a hablar de productos naturales algo más elaborados pero que igualmente van a encajar en esa categoría de “regalo perfecto”, tanto para empresas como para particulares. Y su nombre es cerveza artesana.
La cerveza artesanal, ¿por qué triunfa tanto?
La cerveza elaborada al modo tradicional aventaja en mucho a cualquier cerveza embotellada o enlatada que se pueda encontrar en el supermercado, en multitud de factores. Por eso es un detalle tan significativo volcarse en encontrar una cerveza especial (y no una estándar) para hacer un presente a un cliente de una empresa o a un amigo.
Las ventajas de la cerveza artesana empiezan por su valor nutritivo. Es decir, la cerveza hecha en microcervecerías tiene un procesado diferente a la cerveza que se hace al estilo industrial y por ello conserva mucho más los nutrientes de sales minerales y vitaminas de la malta o la cebada. Además este tipo de cerveza prescinde de aditivos y de conservantes, de modo que es mucho más natural.
Por otra parte la cerveza artesana está hecha en locales pequeños (microcervecerías, usualmente) que distan mucho de las grandes instalaciones fabriles donde se fabrican los productos de consumo de masas. Por tanto consumir cerveza artesana es dejar de colaborar de las emisiones y contaminantes que se generan en las industrias tradicionales.
Y hay un gran punto a favor de la cerveza artesana. No podía ser otro que el sabor: mucho tienen que envidiar las cervezas de supermercado a las cervezas artesanales. Los sabores son más limpios, más claros, los matices de los ingredientes más apreciables y chispeantes… Una cerveza hecha al estilo artesano además permite gran variedad de de creaciones distintas, apostando por hacer productos especiales y originales que no se van a encontrar en ninguna gran superficie comercial.
Por todo esto una cerveza artesanal es un gran gran regalo que, además de ecológico, es delicioso. Poca gente sobre la faz de la Tierra no ha disfrutado alguna vez de un rato de ocio con amigos y con una cerveza helada en la mano. Si a esto momento placentero le sumas la delicadeza de una cerveza artesanal, es sin duda el regalo perfecto.