La leche de avena no tiene la difusión que se merece, pero tiene grandes beneficios nutritivos por tratarse de un alimento altamente digestivo, con una gran riqueza en glúcidos lentos, una fuerte presencia de Fibras Solubles y Vitamina B, presente en una gran cantidad de dietas estrictas y como reemplazo de la Lactosa para aquellas personas que tienen alergia o poca resistencia.
Su preparación está en base a la Avena Integral, pudiendo emplearse como optativos el Aceite de Girasol y hasta la Sal Marina, aunque existen otros ingredientes de acuerdo a las recetas, como la que presentaremos a continuación
Ingredientes Esenciales
- 4 tazas de agua
- 2 tazas de Avena Instantánea
- Esencia de Vainilla (1 cucharada)
Preparación
- Debemos mezclar todos los ingredientes en un recipiente hasta conseguir una mezcla más o menos homogénea, pudiendo agregar como opcional un plátano o un endulzante (puede ser azúcar, o algún edulcorante) para darle más sabor al producto final.
- Posteriormente se coloca en un vaso de licuadora, procesando a distintas velocidades hasta contar con una pasta homogénea, carente de grumos, lo más acuosa posible.
- Si no logramos esto, lo que podemos hacer es utilizar un colador para poder eliminar todo depósito sólido, pudiendo posteriormente agregarlo a otra mezcla o simplemente procesándolo nuevamente, para poder aprovechar más la mezcla.
- Posteriormente debemos batirlo y colocarlo en una nevera, considerándose que es mucho más sabrosa si se sirve bien fría, agregando algún endulzante si el sabor no es el esperado en el momento en que lo servimos en el vaso.