El ahorro de energía en la climatización de nuestro hogar es tan bueno para el bolsillo como para el medio ambiente por eso hay que ser precavido en su uso de forma que optimicemos sus prestaciones lo máximo posible. Tener un aparato de aire acondicionado es algo más que habitual en los hogares de hoy en día. Es por ello que debemos aprender unos pequeños trucos para sacarle el máximo partido, ahorrar y evitar las emisiones y encontrar más información aquí sobre el consumo de cada aire acondicionado.
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Calidad del producto
Puede que te suene el concepto de “electrodoméstico vampiro” y es que hay muchos aparatos que a la larga cuestan mucho dinero porque en un inicio costaron poco. Está demostrado que elegir un electrodoméstico con equilibrio calidad precio puede tener la posibilidad de ahorrar hasta un 60 por ciento que con uno convencional.
Regular la temperatura
Debemos sentirnos a gusto en nuestro hogar y eso depende de gustos, pero lo cierto es que se recomienda una temperatura de 22 grados. Cualquier grado que aumentemos o disminuyamos a partir de aquí hará que nuestro coste crezca hasta un 8%.
Mantén el sistema siempre limpio
Es fundamental que el aparato tenga los filtros en buenas condiciones, eso favorecerá un funcionamiento correcto y no hará que gastes más de lo necesario ya sea intentando forzarlo o reparándolo a posteriori.
Ayúdate de otras cosas para aclimatarte
Por ejemplo, en verano podemos poner ventiladores o utilizar los que tenemos instalados en el techo, abrir las ventanas, etc. En invierno no es preciso ir en manga corta por casa siempre podemos ponernos un jersey para no subir tanto la temperatura. Hay que tener en cuenta también que los cambios bruscos de temperatura pueden perjudicar nuestra salud.
Adquiere buenos hábitos
Puedes abrir las ventanas a primera hora de la mañana o por la noche. Esto ayudará a refrescar tu hogar sin ningún gasto. Además puede apagar el aparato un rato antes de abandonar la casa o la estancia ya que se conservará la temperatura.
Déjate asesorar por profesionales
Puede ser que adquieras un aparato y que después tu hogar tenga mucho sol directo y sea muy amplio. Hay siempre que consultar un especialista para que nos aconseje acerca de nuestras posibilidades y así evitar un gasto que no esté bien amortizado después.
De esta forma podremos prescindir del calor sofocante o el frio gélido pero siempre sin excedernos en los números de la factura ¿Y tú practicas algún truco más?