¿Qué sabes sobre las naranjas? Todos hemos oído la mítica frase de: “¡Bébete el zumo, que se le van las vitaminas!”, y para la mayor parte de la población, hablar del zumo de naranja es hablar de vitamina C. Pues hemos vivido engañados todo este tiempo.
Atención, que vamos a desmitificar estas dos grandes afirmaciones: ni las naranjas son la principal fuente de Vitamina C ni estas vitaminas se evaporan tan rápidamente.
La naranja no es el alimento con más contenido en vitamina C (ácido ascórbico), de hecho, está bastante lejos (50 mg/100 g. frente a pimiento rojo con 190 mg/100 g., perejil con 130 mg/100 g. o kiwi, con 90 mg/100 g. entre otros muchos).
La vitamina C se conserva en el zumo hasta 12 horas después de exprimir la naranja
El zumo de naranja casero es estable y las vitaminas no se van a ninguna parte. Al menos, durante las primeras 12 horas. Eso sí, el sabor se puede tornar un poco amargo. Una vez aclarado que la vitamina C del zumo de naranja no desaparece en un instante, pondremos a prueba otros mitos menos conocidos.
¿Se puede guardar el zumo de naranja en la nevera?
El zumo natural sí se puede guardar en la nevera, las propiedades se conservarán igualmente tanto dentro como fuera del frigorífico. El ácido de la naranja no deteriora el esmalte de los dientes. Tomar zumo de naranja no es malo ni para el hígado ni para la diabetes. Pero ¡cuidado!, zumos naturales, exprimidos en casa. Los zumos envasados ya son otra cosa.
¿Se puede mezclar con leche?
¿Qué pasa si tomamos zumo de naranja y leche a la vez? ¿Se producirá una indigestión? Es cierto que al añadir cualquier ácido a la leche, ésta “se corta”, es decir, se produce la coagulación de las proteínas. La acidez del estómago es mucho mayor que la del zumo de naranja o cualquier otra fruta. O sea, no hay absolutamente nada que puedas hacer para evitar que la leche se corte en tu estómago. Lo que no significa que siente mal en absoluto.
¿Sabías qué si calientas una naranja en el microondas durante 30 segundos a máxima potencia sacarás más jugo? ¡Pues sí! Y si sale alguna naranja amarga (y que no puedas comer), no la tires, échale un poco de sal y el amargor desaparecerá como por arte de magia. Y además, no estará salada. ¡Increíble pero cierto!
Las naranjas tienen Zinc, que alivia el estrés y manganeso que contribuye al buen funcionamiento de nuestro sistema nervioso y mantiene activo nuestro cerebro.
… ¿Y qué más necesitas para empezar ya a tomar naranjas auténticas?