Además de hablarte sobre los diferentes beneficios del pollo ecológico, también te hemos hablado de consejos culinarios para disfrutar mejor de las mejores partes del pollo ecológico. Entre estas partes más conocidas, utilizadas en la cocina y sobretodo más deliciosas, destaca la pechuga, por ser la parte de pollo más suave, rica y exquisita. Hoy queremos explicarte cómo cocinar la pechuga de pollo ecológico.
Es cierto que tanto la pechuga de pollo ecológico como la de pavo ecológico se caracterizan por ser dos de las partes de las carnes de aves más consumidas. ¿Por qué? Fundamentalmente porque éstas destacan –y sorprenden- tanto por su suavidad, como por su textura y sabor ciertamente delicioso.
El tiempo de cocción es el secreto
Pero a la hora de cocinar la pechuga de pollo debemos tener cuidado con no pasarnos con la cocción, ya que entonces quedarán duras
A la hora de prepara la pechuga de pollo, existen diferentes opciones de cocción que nos permiten aprovecharnos de todo su sabor. Toma buena nota:
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A la plancha: es una opción ideal para la pechuga de pollo no muy gruesa, que permite disfrutar de su sabor sin añadir ningún condimento más, basta con una pizca de sal y además resulta deliciosa con una rodaja de limón. También puedes añadir pimienta.
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Hervida: no es una opción tan socorrida, pero también es útil. Basta con lavar bien la pechuga y ponerla en una olla con agua hasta que las tape. En el momento en que empiecen a hacer espuma se debe retirar, y pinchar para saber si están o no crudas.
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Fritas: es la opción más utilizada cuando por ejemplo queremos elaborar pechugas empanadas. ¿Lo mejor? Utilizar aceite de oliva virgen extra.
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Al horno: es ideal cuando se hace en salsa, o con nata.