El astragalus o astrágalo está ganando bastante éxito de un tiempo a esta parte, aunque para nosotros sea una planta nueva con propiedades nuevas no es del todo cierto, ya que esta planta viene utilizándose desde hace siglos en la medicina tradicional China. Su nombre significa “líder amarillo” por todas las propiedades que tiene dentro de la medicina natural y se utiliza primordialmente la raíz, muchas veces combinada con otras plantas u hongos como Maitake, Shiitake y Reishi.
La investigación científica está empezando a confirmar alguno de los muchos beneficios de esta planta y ampliar otros, y pese a que defiende que no es un tratamiento en sí, ha quedado demostrado que si favorece algunos tratamientos y mejora alguno cuadros de personas inmunodeprimidas.
Los suplementos y preparados con astragalus están teniendo buena acogida en tratamientos para mejorara el sistema inmune. Por ello, cada vez se usa más en casos como el cáncer ya que esta planta ayuda a fortalecer nuestro sistema cuando las células cancerosas lo debilitan o los tratamientos como la quimioterapia. La investigación clínica sugiere que favorece un estado de bienestar y reduce los efectos tóxicos de ésta y al mismo tiempo refuerza el sistema inmunológico.
También está indicado en casos de VIH, ya que el virus que conforma el sida inhibe la división celular, resultando imposible que nuestro sistema inmunológico elimine agentes patógenos de nuestro cuerpo. Esta raíz parece ralentizar el acortamiento de telómeros (cadenas de células) producto de la división de las mismas. No solo eso, sino que además los extractos de esta planta favorecen la creación de uno de los elementos que nuestras células necesitan para reproducirse.
Alejándonos un poco de los casos más extremos, el astrágalo también favorece esta misma división celular en la piel con lo cual favorece el factor anti edad y nos mantiene jóvenes por más tiempo. Asimismo en la medicina china también se utilizaba como remedio para los sudores nocturnos, prolapso uterino, falta de vitalidad y cuadros de diarrea. También favorece la eliminación de toxinas, previene el resfriado y la gripe.
También es un poderoso hepatoprotector, ya que protege frente al daño hepático causado por tóxicos y mejora por tanto, el funcionamiento del hígado. Funciona también como cardioprotector por su cualidad hipotensopra y tiene un ligero efecto antiagregante previniendo así infartos, insuficiencias cardiacas y anginas.
En personas diabéticas también juega su papel, ya que equilibra los niveles de glucosa en sangre.
Adquirir astragalus está a la orden día y se puede adquirir en tiendas especializadas como Lamberts, en comprimidos combinados con Reishi y vitamina C que favorecen la propiedad antihistamínica de esta planta. Previniendo así catarros más activamente, estados de asma y problemas respiratorios.
